martes, 30 de abril de 2013
No sé si llamarlo 'mala racha' o 'mala vida'.
viernes, 19 de abril de 2013
Aquí estamos de nuevo.
En verdad no sé cómo empezar todo esto. No sé si desde el principio o desde el final. No sé si odiándote o queriéndote.
Quizás sea más cómodo abandonar el teclado ahora que puedo y olvidar todo esto. O quizás la lucha interna que tengo me impide hacerlo. La cosa es que me duele. Me duele escribir, pensar, recordar. Me duele, o me dueles. Según cómo y quién lo mire. Admito que quizás sea mejor así. Que tanta batalla nos había llevado hasta la más mísera decadencia. Pero ahí seguí yo, luchando contra lo imposible cuando tú habías abandonado hace tanto que ya estabas reconstruyendo los daños. Admito que no me dí cuenta, que no supe ver que ya no jugabas en mi misma liga. Pero siempre pueden haber partidos amistosos entre equipos de diferentes ligas, ¿no?
Claro que tengo miedo. Tengo miedo de pederte totalmente. De no volverte a ver. De que me olvides. Tengo miedo de no volver a escuchar tu risa. Tengo miedo de lo que seré sin ti. O lo que dejaré de ser.
Y es cierto eso que dicen de que los ojos vacíos son los más peligrosos, por el abismo infinito que esconden. Y no sé en qué momento me caí por los tuyos pero para cuando me di cuenta ya no había arnés que me sujetase a la realidad.
Quizás por eso no me di cuenta de que ya no me mirabas a mí. O igual lo que pasó fue que me dejé llevar. No lo sé. No lo sabes. Nadie lo sabe. La cosa es que ya no somos, que ya no soy, porque ya no eres.
Y sinceramente necesito que seas, porque necesito ser, y necesito que seamos.
Así que, volviendo al principio, o al final, la cosa es que te quiero, y que te odio, y que odio todo esto, pero te quiero. Así que como tampoco sé cómo acabar esto, dejo que lo acabes tú mismo.